Más allá de su profesionalización, y de diversidad de intereses en pugna, el juego representa un cambio de dimensión que abre espacios a instancias anómalas que no aceptaríamos en ámbitos más concretos, 'serios' o terrenales, al menos como prácticas regulares o legalizadas. 

La trampa, el engaño, la simulación, aparecen como posibilidades reales dentro del juego, debido a que no hay consecuencias que se extiendan por fuera de su mágico entorno.

Cómo se hacen efectivos estos artilugios, si en realidad todo juego tiene sus leyes, o sus árbitros? Astrológicamente, necesitamos a Urano para transgredir momentáneamente alguna normativa y provocar resultados o alteraciones 'por fuera de la ley'. En ese sentido, la trampa forma parte del juego como súbita creatividad cuya ruptura cobra validez en la medida que no sea detectada debido a su rapidez e imprevisibilidad. Al mismo tiempo, es transgresión que se desarma y es sancionada cuando queda en evidencia, alcanzada por los límites que determina Saturno, ese severo juez que no nos deja hacer cualquier cosa para ganar. (*)

Desde esta perspectiva, el juego es un desafío permanente entre Saturno y Urano; su despliegue hace que ambas energías evolucionen y encuentren nuevas maneras de ser plasmadas: en algunos deportes el VAR (Video Assistant Referee) es una de esas novedades, como ejemplo de depuración del ejercicio arbitral con ayuda de tecnología.

Entonces, Urano quedaría acorralado por esta mejora de Saturno? De ningún modo: energéticamente, si una cualidad refina su expresión, lo hace en el contexto de su relación con otra, y esto es mutuo, afecta a ambos planetas involucrados. Cuál es la posible evolución uraniana aquí? El incremento de creatividad en el juego grupal, y en las habilidades individuales de sus participantes. Esto lleva a que la trampa gradualmente pierda presencia como transgresión, y se manifieste transformada como originalidad resolutiva dentro de las reglas.

No obstante, si hablamos de Urano, seguirán apareciendo genios rupturistas. Esporádicos, inasibles, sin aviso. Quienes amamos el juego deportivo como recreación, agradecidos.

(*) Juegos de naipes como el Truco admiten mentir, es un recurso dentro de la partida. En este caso no hay transgresión, sino especulación y habilidad mercurial, a la que no refiere el enfoque del artículo.

Publicado por Astrokairos